9 de diciembre de 2008

VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

La violencia en contra de la mujer y la absurda parsimonia en Guanajuato
David Martínez Mendizábal

En 1981, el movimiento feminista latinoamericano reunido en Colombia, decidió conmemorar el 25 de noviembre de cada año como el Día Internacional por la No Violencia hacia las Mujeres.

Se eligió tal fecha para conmemorar el asesinato de las activistas políticas Patria, Minerva y María Teresa, de apellido Mirabal, a manos del presidente de la República Dominicana Rafael Trujillo. En 1999 la Asamblea de las Naciones Unidas oficializa este día y exhorta a los gobiernos y sociedades de todos los países a erradicar el problema de la violencia hacia las mujeres.

La ONU y el movimiento feminista han tenido un papel relevante en esta materia. En un apretado resumen se pueden señalar como acontecimientos internacionales clave los siguientes:

•1981 se efectúa la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la Mujer, mejor conocida por la CEDAW, por sus siglas en inglés.
1993, II Conferencia sobre los derechos de la mujer que tuvo como elemento sustantivo la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia en Contra de la Mujer.
•1994, la Convención Interamericana de Belem do Pará dirigida a establecer mecanismos para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer.
•1995, la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer en Beijín, China que elabora una plataforma de acción.

A partir de estas fechas el activismo del Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer –UNIFEM- ha sido amplio.

Su vínculo con gobiernos y con organismos de la sociedad civil, ha tenido como marco la definición compartida de violencia, entendida como todo acto basado en el género que tiene como resultado posible o real un daño (económico, político, cultural, psicológico, físico, sexual) ya sea que ocurra en el ámbito público o privado.

En México, en general ha sido aceptado y compartido en el discurso el reto de eliminar toda forma de violencia hacia la mujer.

Sin embargo Iglesias, sociedad, gobiernos, y ONGs, en la práctica, han tomado caminos diversos y contrarios porque las concepciones de familia y del papel de la mujer están matizadas por las ideologías que distinguen a cada grupo.

Un ejemplo de tal contradicción en las posturas es el papel vergonzoso que ha tenido el Instituto de la Mujer en Guanajuato y la mayoría panista del Congreso local.

En la Legislatura LIX de la Cámara de Diputados (y diputadas) se aprobó en el 2006 la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.

Esta Ley la introdujo entre otras comisiones la de Equidad y Género y su propósito es el de impulsar los derechos de la mujer no sólo en el ámbito intrafamiliar sino en la esfera pública.

La Ley fue detenida en el Senado, pero finalmente entró en vigor en febrero del 2007.

De acuerdo con los ordenamientos internacionales como el de la CEDAW, la Ley aprobada en el 2007 exhorta a los gobiernos locales a armonizar sus disposiciones legales con la línea normativa expresada en el ámbito federal.

Guanajuato y Oaxaca no lo han hecho.

Este exhorto no es algo prescindible. Es tan fuerte el problema, no sólo de la violencia intrafamiliar sino de toda forma de violencia hacia la mujer, que ninguna acción sobra. Los que decidan dar un paso atrás en esta lucha, por ética, deben expresar su postura.

Las razones esgrimidas por los diputados y diputadas del PAN y por la titular del Instituto de Mujer en Guanajuato para justificar su inacción develan una formación intelectual muy pobre y un diagnóstico del problema inaceptable.

El bajo perfil del Congreso Local, de algunos miembros del gabinete estatal y la tónica ideológica del partido en el gobierno, se evidencian ante estos problemas.

Se puede argüir la soberanía del estado de Guanajuato para autodeterminarse, pero de cara al Día Internacional por la No Violencia hacia la Mujer sería muy bueno que emitieran un comunicado formal, argumentado y claro, sobre de su postura con respecto a este grave problema, cuáles son las los programas que han impulsado y los resultados que se han obtenido.
Esto es también ejercer el derecho a la información.

Fuente:
martizaval@hotmail.com
http://www.milenio.com/node/121036

Enviado por: Ricardo Munguia Hurtado

1 comentario:

Anónimo dijo...

En las líneas de este artículo se puede analizar por un lado los grandes logros que han logrado las mujeres tanto en lograr que sean tomadas en cuenta en puestos más importantes en los que antes no tenían acceso, pero por otro lado, como en algunas partes de Lationoamerica y en especial en los estados de la república mexicana mencionados en el artículo aún no se ha evolucionado la forma tradicionalista de pensar en la sociedad, esdecir, sigue siendo una sociedad muy machista.

RICARDO MUNGUIA HURTADO